El verano es sinónimo de vacaciones, escapadas y viajes. Sin embargo, las altas temperaturas, los trayectos largos y los cambios de rutina pueden afectar a nuestro bienestar físico. Desde la fisioterapia y la ergonomía podemos aplicar estrategias sencillas para viajar con mayor comodidad, prevenir molestias musculares y soportar mejor el calor.
Te compartimos algunos consejos prácticos para cuidar tu cuerpo mientras disfrutas del verano.
1. Mantén una buena postura durante el viaje
- En coche, bus o tren: ajusta el respaldo de manera que la espalda quede recta y apoyada. Evita encorvarte hacia delante.
- En avión: utiliza un cojín cervical o una almohada pequeña para mantener el cuello alineado.
- Movilízate cada 1-2 horas: aprovecha para caminar unos pasos, estirar piernas y activar la circulación.
2. Hidratación constante
El calor aumenta la pérdida de líquidos y electrolitos:
- Bebe agua con frecuencia, incluso sin sed.
- Evita el exceso de café o alcohol, ya que favorecen la deshidratación.
- Complementa con frutas ricas en agua como sandía, melón o naranja.
3. Ropa y calzado adecuados
- Opta por ropa ligera y transpirable de algodón o lino.
- Usa calzado cómodo, con buena sujeción y suela antideslizante, especialmente en superficies húmedas o resbaladizas.
- Evita las chanclas para caminar largas distancias: pueden alterar la pisada y causar sobrecargas.
4. Estiramientos sencillos durante el viaje
Unos minutos de movimiento ayudan a prevenir contracturas y rigidez:
- Estira el cuello suavemente en todas las direcciones.
- Rueda los hombros hacia atrás para liberar tensión.
- Realiza flexo-extensión de tobillos para activar la circulación en las piernas.
5. Evita los golpes de calor
- Viaja en las horas más frescas del día siempre que sea posible.
- Protege la cabeza con gorra o sombrero.
- Busca sombra y refréscate con agua en la piel si sientes sobrecalentamiento.
6. Adapta el equipaje
- Utiliza maletas con ruedas y evita cargar peso de manera asimétrica en hombros o espalda.
- Si debes levantar equipaje, hazlo doblando las rodillas y manteniendo la espalda recta.
Viajar en verano puede ser una experiencia mucho más cómoda y segura si cuidas tu postura, te mantienes hidratado y escuchas las señales de tu cuerpo. Pequeñas medidas desde la fisioterapia y la ergonomía marcan una gran diferencia para disfrutar al máximo de las vacaciones sin dolores ni sobresaltos.
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